Así lo ponen de manifiesto los fisioterapeutas madrileños con motivo de la celebración, el próximo sábado, 29 de febrero, del Día Mundial de las Enfermedades Raras.
Las intervenciones tempranas en fisioterapia evitan, en muchos casos, complicaciones futuras que pueden suponer ingresos hospitalarios, deterioros en la salud, secuelas y daños irreparables en pacientes con enfermedades raras.
Esta es una de las consideraciones que realiza el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) con motivo de la celebración, el próximo sábado, 29 de febrero, del Día Mundial de las Enfermedades Raras y que la Institución colegial aprovecha para reivindicar el papel de la fisioterapia en su tratamiento.
Así, la fisioterapeuta y portavoz del CPFCM, Paqui Guerrero, incide en la importancia de la atención en edades tempranas pues “si mejoramos la atención en niños, se podría evitar en muchos casos este tipo de complicaciones y para ello, sería necesario “una mayor inversión para aumentar la plantilla de profesionales y adaptar los tratamientos a las necesidades reales de los pacientes».
En cualquier caso, afirma Guerrero, “el tratamiento continuado con fisioterapia se hace imprescindible en las diferentes etapas de la enfermedad para frenar el deterioro físico del paciente” y recuerda que “existen tipologías de las denominadas enfermedades raras que se manifiestan en edades más tardías y que conllevan un patrón degenerativo en su evolución”.
«…una mayor inversión para aumentar la plantilla de profesionales y adaptar los tratamientos a las necesidades reales de los pacientes».
Y es que, según explica la también fisioterapeuta y miembro de la Comisión de Educación Especial e Integración del CPFCM, Ana Díaz, “la fisioterapia dispone de muchas herramientas terapéuticas para tratar las principales disfunciones que producen estas enfermedades, como pueden ser la disfunción motriz, el dolor, la inflamación de los tejidos, la disfunción cardiovascular respiratoria, o las alteraciones o limitaciones musculoesqueléticas”. Por este motivo, el trabajo del fisioterapeuta es fundamental para que estos pacientes puedan adquirir el máximo desarrollo físico y funcional.
“Aplicando en cada intervención el razonamiento clínico, las herramientas de valoración y diagnóstico fisioterápico, los avances tecnológicos a nuestro alcance y promoviendo una mejor coordinación multidisciplinar, es evidente que la fisioterapia suma en el buen tratamiento de las enfermedades raras”, añade Guerrero.