Hemos tenido conocimiento de dos proyectos de la Comunidad de Madrid que invaden las competencias de la fisioterapia, por lo que el Colegio ha contactado con los responsables respectivos, exigiendo la modificación inmediata de estas iniciativas.
Por un lado, se trata del Programa de Prescripción de Actividad Física y Ejercicio Físico -“Salud Activa”– que se va a poner en marcha este mes desde los centros de Atención Primaria de la región.
Siendo una iniciativa interesante en beneficio de la sociedad madrileña, este programa deja fuera a los fisioterapeutas, que somos los profesionales sanitarios formados y capacitados para el tratamiento de pacientes con patología o lesión a través del ejercicio terapéutico. Por el contrario, la implantación de este programa se realizará a través de personas con la titulación universitaria en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, a pesar de que muchas de las personas que se puedan beneficiar de este programa arrastrarán algún tipo de dolencias.
Desde el Colegio hemos dirigido un escrito a la directora general de Salud Pública, Elena Andradas, solicitando que sean fisioterapeutas los profesionales sanitarios que prescriban ejercicio físico para mejorar la salud de la población madrileña y la prevención de enfermedades, y que aplique este criterio en todas las iniciativas que puedan surgir en esta misma línea.
Cáncer infantil
El segundo proyecto es la apertura de la “Aceleradora Unoentrecienmil” en el Hospital La Paz. Es un nuevo servicio para pacientes pediátricos oncológicos con una terapia complementaria no farmacológica que se apoya en el ejercicio físico.
De nuevo, se trata de una iniciativa interesante para agilizar la recuperación de niñas y niños con cáncer, pero hemos manifestado nuestro total rechazo en cuanto a la elección de los profesionales que participan en esta iniciativa. De forma incomprensible e inadmisible, no hay fisioterapeutas colegiados en el grupo de trabajo. Ni siquiera se ha tenido en cuenta a las compañeras y compañeros que trabajan en este hospital madrileño (se ha externalizado este servicio).
Igual que en el primer caso, este proyecto va en contra de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias al encomendar tratamientos a profesionales no sanitarios, lo que supone un atentado para la salud pública. Por poner dos ejemplos, la fisiopatología de un proceso oncológico o la cardiotoxicidad de la quimioterapia hace vulnerables a estos pacientes pediátricos. Su tratamiento supervisado ha de superar una variedad de controles personalizados con una base de conocimiento muy sólida por parte del fisioterapeuta que debería encargarse de ello.
Resulta inaceptable que ningún profesional no sanitario tenga a su cargo niños con procesos oncológicos, exigencia extensible a cualquier paciente susceptible de mejora de su enfermedad o lesión con ejercicio terapéutico.
También hemos exigido a la Dirección del Hospital La Paz, en cumplimiento de la legalidad vigente y, sobre todo, para garantizar la mejor evolución de estos pacientes pediátricos, la presencia de fisioterapeutas colegiados en el proyecto “Aceleradora Unoentrecienmil” y también en cualquier proyecto en este centro que contemple tratamientos mediante ejercicio terapéutico.
Desde el Colegio apostamos por el modelo que ha implantado el Servicio Murciano de Salud (SMS), que ha creado en el hospital Santa Lucía la primera unidad de ejercicio físico terapéutico para pacientes oncológicos de la región murciana.
A través de esta unidad, que cuenta con fisioterapeutas expertos en oncología, se ayudará a los pacientes con prehabilitación y rehabilitación, para paliar algunos de los síntomas más frecuentes derivados de la enfermedad, sus tratamientos y la cirugía, como el dolor, la fatiga, la astenia tumoral, la acumulación de líquido linfático o la pérdida de masa ósea, entre otros.