Los costaleros pueden llegar a soportar una media de 35 kilos en cada paso durante un periodo de dos, cuatro, o incluso seis días de Semana Santa. Es por ello que el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid recomienda a los costaleros realizar un entrenamiento y actividad física adaptada y supervisada, combinada con tratamiento fisioterapéutico que evite posibles lesiones.
En concreto, entre las lesiones más frecuentes que pueden sufrir los costaleros se encuentran los esguinces de rodilla o tobillo, las lumbalgias, hernias o incluso las roturas de menisco, ya que durante estos días se incrementa el esfuerzo físico de manera exponencial en poco tiempo y en muchos casos, además, se hace una mala distribución del peso bajo el paso.
Para evitar lesiones, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid recomienda a los costaleros que, durante la marcha, mantengan la cabeza erguida y la mirada al frente para prevenir posibles lesiones en el cuello, así como para contraer la musculatura abdominal y lumbar y mantener una postura correcta.
Asimismo, inciden en que la pisada debe realizarse con toda la planta del pie, sin flexionar del todo las articulaciones de la muñeca y el codo y recuerdan la importancia de utilizar medidas de protección como las fajas o los vendajes sobre aquellas partes más susceptibles de sufrir lesiones.
Por último, tras la procesión, se recomienda, de la misma forma que se hace en otro tipo de deportes, parar lentamente y realizar ejercicios de estiramiento, así como seguir moviéndose a un ritmo más lento para enfriar los músculos progresivamente y evitar la aparición de posibles dolencias o complicaciones.