Los cuatro colegios profesionales han enviado una carta conjunta a Enrique Ruiz explicándole la situación de indefensión en la que se encuentran y para ofrecer su apoyo en aquellas necesidades de asistencia que puedan existir.
Los colegios profesionales de logopedas, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas y nutricionistas de la Comunidad de Madrid reclaman al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz, el cierre obligatorio de sus centros. Así lo han especificado en una carta remitida al responsable de la Sanidad madrileña: “Amparándonos en el Real Decreto 8/2020, todos los colegios sanitarios aquí presentes reclamamos la inclusión de nuestros distintos colectivos (fisioterapia, logopedia, terapia ocupacional y nutrición y dietética) entre los diferentes profesionales, con establecimientos de obligado cierre, excepto en los casos en los que nuestra labor suponga una intervención vital y urgente fundamental para la evolución del paciente”.
Dada la alerta sanitaria, el pasado 14 de marzo, en base al Real Decreto 463/2020, se ordenaron una serie de medidas para la gestión de la crisis del COVID-19. En este Real Decreto, se especificaba el cierre al público de ciertos establecimientos, entre los que no figuraban los correspondientes al ejercicio profesional propios de los colectivos a los que los que estos colegios representan.
Sin embargo, numerosos centros de logopedia, fisioterapia, terapia ocupacional y nutrición han cerrado sus instalaciones, basándose en un gran ejercicio de responsabilidad y en la nula actividad debido a las limitaciones de movilidad, quedando, de esa forma, desamparados en materia laboral determinada por el Consejo de Ministros. Por eso han querido trasmitir al consejero Enrique Ruiz la situación de indefensión en la que se encuentran.
Desde estas entidades colegiales explican que, como profesionales sanitarios, deben ser garantes de seguridad, reduciendo las posibilidades de contagio y ayudando así a minimizar la curva de contagios de nuestro país. No obstante, en la situación actual, no pueden garantizar ni la seguridad de profesionales ni de los pacientes, ya que no pueden evitar los contagios debido a:
• No disponen de material de protección necesario para los profesionales, los pacientes y las familias, ni la desinfección completa y constante de los centros y materiales utilizados, dada la carencia existente en líneas generales por el profundo desabastecimiento de medios de protección.
• En la mayoría de las ocasiones, su intervención supone el contacto directo con el paciente, eliminando así la distancia de seguridad y multiplicando el riesgo de contagio y/o propagación del virus.
CAMBIO DE REGULACIÓN
Durante estos días, se ha ido publicando nueva normativa, actualizando la base legal al respecto, sin especificar o incorporar de forma el cierre solicitado. Sin embargo, estos colegios profesionales aseguran que diferentes comunidades autónomas han tomando la iniciativa legislativa regulando a este respecto. Es el caso de Castilla la Mancha, Galicia, Andalucía y Cataluña. En este sentido solicitan que se dicten las normas oportunas para declarar a la sanidad ambulatoria como no esencial y, por consiguiente, se proceda a ordenar su cierre, a excepción de aquellos supuestos de atención.
AL SERVICIO DE LA SANIDAD MADRILEÑA
Por otra parte, los colegios profesionales de logopedas, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas y nutricionistas de la Comunidad de Madrid, como profesionales sanitarios, han ofrecido máxima disposición para apoyar al sistema sanitario madrileño en aquellas necesidades de asistencia que puedan existir, tanto en los centros hospitalarios como en los sociosanitarios.