Así lo manifestó Martín Urrialde durante su intervención en el foro informativo `Fisioterapia en Oncología: suma calidad a tu vida con Fisioterapia’, organizado por el CPFCM con motivo del Día de la Fisioterapia. El encuentro que tuvo lugar en Torre ILUNION contó con la participación de representantes de asociaciones de profesionales y pacientes afectados.
“El tratamiento del dolor, el linfedema, la disfunción sexual, la fatiga o el dolor son algunas de las secuelas del cáncer que trata la Fisioterapia a la que muchas veces el acceso del paciente no es fácil, y otras no cuenta con el número suficiente de profesionales”, indicó el decano del CPFCM, que también ha destacado la importancia de la investigación en este ámbito y la colaboración con los afectados por esta enfermedad.
En este sentido, el fisioterapeuta de la Asociación Infantil Oncológica de Madrid (ASION), Borja Recuenco, incidió en la necesidad de incluir la figura del fisioterapeuta en las unidades de oncología infantil que “actualmente carecen de este especialista que desarrolla una labor fundamental en la mejora de la calidad de vida del niño”.
Además, Recuenco solicitó la creación de centros de referencia fuera del hospital “a los que puedan acudir las familias cuando se termina la atención del hospital”, al tiempo que destacó la importancia de la formación para lograr “que el entorno educativo, formado por compañeros y profesores, entienda la situación de los niños que padecen cáncer y que además de la rehabilitación física han de realizar un esfuerzo mayor de refuerzo educativo y les apoye en este proceso en el que, el respaldo de la familia también juega un papel trascendental”.
Por su parte, la integrante de la Comisión de Fisioterapia en Oncología y Cuidados Paliativos del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, Yolanda Robledo, ha resaltado el papel del fisioterapeuta en el ámbito de los cuidados paliativos a la hora de mejorar la calidad de vida de las personas.
“Hay que hacer un refuerzo en el ámbito de los cuidados paliativos ya que, como consecuencia de la cronificación del cáncer, hoy en día suponen un tratamiento de años y debemos concienciar a los profesionales médicos de que los fisioterapeutas podemos actuar, no sólo en esta etapa, sino a lo largo de toda la enfermedad, desde su diagnóstico”.
Mayor necesidad de información
En este punto, la vicepresidenta de la Asociación Española de Linfedema (AEL), Paloma Domingo, ha pedido la implementación de más servicios de fisioterapia oncológica dentro de los equipos de rehabilitación de los hospitales, puesto que “además de salvar la vida del paciente, hay que hacerlo con la mejor calidad posible, y para eso es necesario que los fisioterapeutas estemos presentes en el equipo desde el principio”.
Domingo ha insistido también en la necesidad de mejorar la formación para dar a conocer este ámbito de la fisioterapia a nivel profesional ya que, tal y como ha explicado, “faltan muchos fisioterapeutas formados y el camino ha de estructurarse en torno a la formación, acompañada de información e investigación”.
Sobre la importancia de la información en este campo se ha pronunciado la integrante de la Junta Directiva de la Asociación Madrileña de Afectados de Linfedema (AMAL), Carmen Inés Sánchez, que ha pedido que se trabaje en mejorar la información al paciente.
“Es fundamental que no haya pacientes que no sepan lo qué les pasa, que lo descubran después de cierto tiempo, o que tengan diagnósticos erróneos en este ámbito, y este es un escenario que se repite en los casos de linfedema, que en muchas ocasiones no son conocidos”, señaló.
El encuentro se ha cerrado con un llamamiento del decano del CFPCM, José Antonio Martín Urrialde, a “transmitir al paciente que no están solos en el proceso del cáncer y que deben acudir siempre a fisioterapeutas especializados y que ofrezcan garantías, pues son los únicos habilitados para este tipo de tratamiento”.