El CPFCM destaca el papel de los fisioterapeutas dentro de los equipos multidisciplinares que tratan a pacientes con secuelas como consecuencia de haber tenido adicción al tabaco

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM), ha reivindicado una mayor presencia de fisioterapeutas en las consultas de deshabituación tabáquica en Atención Primaria, pues “existen todavía muy pocas y, a día de hoy, prácticamente ninguna cuenta con la presencia de estos profesionales”.

Así lo ha puesto de manifiesto la decana del CPFCM, Aurora Araújo, con motivo de la conmemoración del Día Mundial sin Tabaco, que la Institución colegial ha aprovechado también para poner en valor la figura del fisioterapeuta en los tratamientos de abandono del tabaco.

En esta línea, Araújo ha subrayado la importancia del papel del fisioterapeuta que, dirigido a apoyar la intervención de otros profesionales en los equipos multidisciplinares, “ayuda con los primeros síntomas que suelen aparecer como consecuencia del proceso de abandonar esta adicción”.

Y es que, aunque la labor del fisioterapeuta es importante durante todo el proceso de abandono del hábito, “al comenzar a activarse el movimiento ciliar aparece un aumento molesto de las secreciones, lo que provoca una falsa sensación de empeoramiento y es ahí donde el fisioterapeuta puede entrar a reeducar la tos productiva, la automovilización y manejo eficaz”, indica. En este sentido, los fisioterapeutas recuerdan que hay secuelas que pueden iniciarse una vez abandonado el hábito pues, “aparece una mayor susceptibilidad a las infecciones respiratorias y secreciones abundantes, así como consecuencias a nivel sistémico como una peor calidad de la pared vascular que puede incluso predisponer a las amputaciones, sobre todo, en diabéticos. En cualquier caso, se prioriza siempre el manejo de secreciones, la reducación de la tos o la mejora de la dinámica respiratoria en función de los síntomas”, afirma. Además, los fisioterapeutas recuerdan el importante papel de los fisioterapeutas como profesionales sanitarios implicados en este proceso y que consideran “todavía desconocido” en la mayoría de los casos pues, según explica Araújo, “la sociedad aún asocia el proceso de dejar de fumar a otras disciplinas que tratan secuelas como la ansiedad, entre otros. Por este motivo, desde la fisioterapia tenemos que seguir trabajando para dar a conocer nuestra intervención en estos equipos, como refuerzo y como herramienta para mejorar la respuesta fisiológica al proceso de dejar el tabaco”, concluye.

La prevención como mejor tratamiento

En relación con este objetivo de acercar a la población la figura del fisioterapeuta como agente implicado en el proceso de abandono del hábito del tabaco, el CPFCM mantiene activas distintas colaboraciones con la Fundación Lovexair, con la que ofrecen distintos talleres orientados a la prevención y concienciación de los peligros del tabaco en distintas edades y ámbitos. Así, imparten talleres en centros escolares e institutos, a fin de concienciarles de los peligros del tabaco.

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